Lo que hacemos formando equipos de desempeño superior proviene de nuestra exploración directa en estos eventos y entrenamientos grupales por más de 20 años. Hemos aprendido a no empaquetar nada para los equipos. Preferimos hoy día entenderlos muy bien antes de intervenirlos.

Por esa razón podemos decir que nuestros entrenamientos son únicos. No solo por la experiencia acumulada por años, o la multiculturalidad y niveles jerárquicos múltiples que nos ha especializado. Contamos con fundamentos muy sólidos en entrenamiento experiencial con base en la aventura. Conocemos cómo es retar a los equipos. Ponerlos a prueba. Explorar sus propios límites, y cómo pueden rebasarlos. Sabemos cómo se comportan los diferentes roles de los equipos. Permitimos experiencias de impacto profundo en el ser de las personas para un mejor hacer juntos.

Combinamos metodologías de conversación pura desarrolladas experiencialmente. Exploramos juntos nuevas formas de sentirse equipo, construcción de franqueza y confianza que permitan desarrollar INTELIGENCIA COLECTIVA. Sabemos ofrecer en el momento indicado una experiencia outdoors de alto impacto, (aprendzaje experiencial) lo mismo que una serie de sesiones de aprendizaje a ser equipo mediante conversaciones relevantes, francas y significativas.

Básicamente nos encanta ayudar a modificar el lenguaje de los equipos, en el que su conversación demuestre claridad con un objetivo común y se pueda sentir el compromiso. Unas metas de desempeño muy bien masticadas por el equipo para que sean muy desafiantes lo mismo que reales. Una práctica permanente de buena comunicación, con pertinencia, con la frecuencia y por los mecanismos idóneos. Una medio para mantener al equipo conectado, presencial, o no presencialmente. El lenguaje de los equipos tiene que demostrar confianza. La confianza es la goma de las relaciones y de los equipos. En los equipos que toman decisiones debe hablarse la verdad, y debe poderse disentir. Decir No, es necesario, y aceptado por los miembros. El lenguaje de los equipos debe usar el plural, expresando un sentimiento genuino, y sus relaciones basarse en responsabilidades mutuas, además de las individuales con cada rol. Los equipos responden por un todo. No por fracciones. Finalmente, el lenguaje de los equipos debe dejar evidencias de que es divertido estar juntos, trabajar, desafiarse, caer, volver a empezar, o inclusive celebrar frecuentemente los logros.

Ya lo sabes. Fuerte compromiso con un objetivo común, comunicación, confianza, mutua responsabilidad, y diversión, hacen de los equipos que valga la pena pertenecer a ellos lo mismo que invertir en su desarrollo perdurable.